Nos hemos asesorado adecuadamente, hemos asumido las responsabilidades que conlleva y por fin hemos decidido que vamos a tener un perro o gato en casa.
Enhorabuena, un nuevo miembro llega a casa. Tienes una nueva responsabilidad. Debes instalarlo en el hogar y acondicionar tu casa, buscarle un nombre, planificar su educación, hacerle su ajuar… es uno más en casa y tiene sus propias necesidades de espacio y de dedicación por tu parte.
Lo primero que tenemos que hacer a la llegada de nuestro cachorro a casa, es concertar una cita con el veterinario para realizar una revisión completa, y poder valorar su estado sanitario. Hay que tener en cuenta que el cachorro va a pasar una etapa crítica, separado de la madre, enfrentado a una nueva alimentación, expuesto a enfermedades, en manos que quizás sea la primera vez que tienen un perro o gato, en plena fase de socialización. Se plantean muchas preguntas por resolver. ¡Busca ayuda en el veterinario!
Que nuestro perro nos acompañe sano durante muchos años dependerá en parte de su genética, pero también de cómo lo cuidemos, el trato que le dispensemos y de cómo lo alimentemos.
Así que podíamos plantear las necesidades básicas o los pilares del bienestar del cachorro en:
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- Un entorno y ambiente espacioso.
- Comportamiento y correcta educación.
- Higiene y salud.
- Dieta sana.
Su entorno y ambiente:
Cuando llegue a casa el cachorro deje que la explore siempre bajo su supervisión.
Le buscaremos el lugar para dormir más adecuado con una cama confortable que no pueda mordisquear fácilmente. Evite que se acostumbre a los dormitorios. Al principio se puede dejar una prenda impregnada con nuestro olor en su cama para que se tranquilice.
Hay que mantener limpio su espacio lavándolo con frecuencia. Conviene luego que se desinsecte. La cama es uno de los lugares preferidos de los parásitos y no pueden convertirse en un almacén de suciedad. Todo lo que tu cachorro emplee, incluidos los juguetes, debe ser lavado cada 3 o 4 días. Los recipientes del agua y comida convienen que sean de acero inoxidable con sistema antivuelco manteniéndolos siempre limpios sin restos de comida.
Comportamiento y correcta educación.
La única manera de que el cachorro pueda convivir en casa es que reciba una educación cuidadosa, de otra manera resultará un compañero molesto.
Debemos comenzar lo antes posible a conseguir un buen comportamiento y obediencia enseñándole órdenes que por su repetición aprenda. El valor del NO es importante, es una instrucción muy útil para que dejen de hacer lo que están haciendo o no comiencen a hacer algo que no queremos nosotros.
Debemos acostumbrarlo al collar y la correa, a horarios de comida y de salida a la calle… Recuerde que un perro bien educado y adiestrado es un excelente amigo.
Higiene y salud
La higiene y aseo desempeña un papel muy importante tanto en la salud de su cachorro como en el vínculo que comparten.
El cepillado: El perro debe estar limpio en todo momento pues convive con nosotros, la mejor manera de mantener su higiene sin alterar su piel es el cepillado diario. Hay que acostumbrarlo desde pequeño, la frecuencia dependerá del tipo de pelo pero lo podemos hacer todos los días.
El baño: La frecuencia del baño dependerá de las necesidades en función de la raza, tipo de pelo, alguna patología en piel… en general no inferior a un mes. Utilice agua templada y champús especiales para cachorros. Después del baño, hay que secarlo completamente cuidando que no quede húmedo y se enfríe.
Oídos: Hay productos específicos, se echan en el conducto, se masajea y se limpia el oído con una gasa. Nunca emplearemos bastoncillos.
Boca: Muy importantes en cachorros de raza pequeña que tienen mayor tendencia a acumular sarro. Importante dar una dieta a base de pienso, revisiones periódicas en el veterinario y porque no un cepillado de dientes con productos específicos cada cierto tiempo. Todo es cuestión de acostumbrarlos.
Uñas: Todos los cachorros requieren un adecuado cuidado de las uñas. Utilizaremos cortaúñas especialmente diseñados para ellos e iremos efectuando pequeños cortes sin llegar al vaso sanguíneo de la uña.
- La salud de tu cachorro, como reconocer un cachorro sano, estos son los signos de salud:
- Ojos brillantes, sin manchas ni legañas.
- Estado de alerta, atiende a los sonidos, vuelve la cabeza.
- Oídos limpios, sin expeler malos olores.
- Piel limpia, sin zonas irritadas, pelo suave.
- Dientes bien alineados y mordida de acuerdo con su raza.
- Las proporciones responderán a su estándar racial y no se le advertirán defectos en el apoyo de las extremidades.
- No debe estar gordo, aunque los cachorros parezcan bolas de peluche, hay un límite.
- Las heces deben estar bien formadas, sin presencia de parásitos.
- Que el abdomen no esté demasiado prominente ya que indica parásitos.
- Palpar los testículos en machos: La edad a la que descienden varía de unos individuos a otros. Puede ir desde una semana hasta los 8 meses.
Llévelo al veterinario para que le hagan un chequeo de salud, además le recomendará el programa de vacunación y desparasitación más apropiado para su cachorro, de esa manera podemos prevenir enfermedades muy importantes que incluso pueden llegar a causarle la muerte.
Alimentación, dieta sana
Es muy importante para mantener la salud de nuestros animales que mantengan una dieta equilibrada la cual cubrirá sus necesidades energéticas y proporciona los nutrientes adecuados. Animales bien alimentados, estarán mejor por dentro y por fuera.
Lo ideal es que consuman alimento seco, adaptado al tamaño de su raza, etapa de crecimiento y a cada necesidad.
No lo alimente con desperdicios. Recuerde que su mascota NO es un cubo de basura.